Casa unifamiliar con jardín en la isla de Mallorca
En el regazo de la prominente montaña de roca calcárea, en la urbanización residencial de “La Font", en Pollença, se sitúa esta vivienda, un proyecto para el cual el arquitecto Miquel Lacomba buscó la esencialidad y un lenguaje desnudo, abierto a otras visiones.
El municipio de Pollensa se encuentra en el extremo norte de Mallorca, integrado dentro de la Sierra de Tramuntana, el espacio natural más valioso y extenso de la isla. Sin duda uno de los lugares más emblemáticos de Mallorca, por la belleza de sus paisajes, donde se unen el mar y la montaña.
La edificación
Se sitúa en el fondo de la parcela, orientada al sur hacia el jardín, con un bosque de pinos y encinas existentes, y enmarcando el perfil de la montaña. Una piel de piedra arenisca en fachadas, cubiertas inclinadas y pavimentos consigue que la construcción sea percibida de manera unitaria desde el exterior.
La distribución
Se desarrolla prácticamente en un solo nivel, excepto el volumen de planta piso. Un único espacio integra cocina, comedor y zona de estar, donde la situación estratégica tanto de la escalera de madera como de los muebles de cocina y de la entrada, permiten organizar y matizar las relaciones entre estas zonas.
A lo largo de este ámbito se sitúa el porche, donde las persianas correderas de madera actúan como filtros de luz e intimidad. La escalera de madera conduce al dormitorio principal y al estudio abierto en doble altura.
Los dormitorios
Ubicados en la primera planta, el suelo se cubrió con madera, a diferencia de la planta baja, donde se optó por piedra natural. La situación de la piscina, y resto de intervenciones en el exterior ofrecen vínculos directos con la naturaleza del lugar. Fotografías: Miquel Àngel Lacomba y Mauricio Fuertes a través de plataformaarquitectura.cl