Muebles básicos para la terraza
Aunque esta semana parece que va a caer toda la lluvia que no tuvimos durante el invierno, muchos andáis poniendo a punto vuestras terraza o porches para disfrutar en ellas del buen tiempo. Pensando qué muebles debéis renovar o comprar por primera vez. Una buena opción para exteriores es optar por muebles de estructuras metálicas, de aluminio o bien de acero inoxidable. Son ligeros, se pueden mover con comodidad y su durabilidad está asegurada.
¿Cuáles son los muebles básicos para una terraza? Pues depende del tamaño, sería la primera premisa. La firma italiana Coro Design nos ha instalado este escenario en medio de un prado y en él nos apetece quedarnos de inmediato. Pero una vez pasado el primer impacto, analicemos como buen@s decoratrixes.
Un sofá, en este caso un sofá rinconera con chaise-longue si puedes permitírtelo. El sofá Nest de Coro Design tiene una estructura de acero inoxidable y los brazos y respaldo un trenzado de cuerda que en realidad es poliéster. El relleno de los asientos y el tejido de los cojines están preparados para resistir la humedad y el relente. Si no consigues esta opción, cuida bien tus cojines y retíralos por las noches para que te duren.
Es precioso este sofá, me encanta su versión en loneta naranja, y tiene pinta de ser comodísimo. Buen fondo, brazos inclinados para recostarse, cojines extra, chaise-longue...
Las tumbonas: otro básico en una terraza. Sin tumbonas no hay verano, nada como tumbarse bajo un árbol o quedarse de noche en la terraza relajándose. También es importante su ligereza y durabilidad. En este caso, la tumbona L3, de Coro Design, tiene un diseño ligerísimo y su tapizado es un tejido técnico, resistente al agua y a la humedad. Se complementa con un toldito para poder leer o para no tostarse demasiado la cara.
Y si tienes espacio no hay nada más agradable que cocinar al aire libre. Esta sería la barbacoa de mis sueños, a gas y con espacio para almacenar los utensilios básicos. !Ay!, que me estoy animando a arreglar mi terraza yo también, no penséis: "En casa del herrero..."