Cocina distribuida en dos frentes y comedor de diario
Si estás pensando en meterte en obras y renovar tu cocina por una cocina blanca, te habrás dado cuenta de que este acabado arrasa, ¡y lo sabes! Hubo una época en la que parecía que iba a ser desplazado por lacas brillantes en vivos colores (rojo, verdes, azules, amarillos y naranjas), y no hace tanto, el negro fue tendencia tanto en el mobiliario de cocina como en los electrodomésticos. Sin embargo, el blanco, ajeno a modas pasajeras, sigue siendo la opción más demandada. En este caso, el color blanco de los muebles se combinó con un frente de azulejos biselados que protege la pared de salpicaduras y manchas; ladrillo visto, encimera de madera y electrodomésticos de acero. ¡El blanco va con todo!
Con planta ancha y alargada, se optó por una distribución en dos frentes: en uno, con la pared de ladrillo visto, se ubicaron la placa de cocción y el fregadero. El otro se destinó a zona de trabajo y almacén, con gaveteros y cajones en la parte inferior y vitrinas, en la superior. A continuación, se instaló el frigorífico, un combi de dos puertas en acero. Entre éste y la puerta de entrada se situó un mueble auxiliar para organizar menaje de uso diario y guardar pequeños electrodomésticos. Además, para contar con más zonas de almacén, se colocó una estantería de pared, que resulta muy práctica para tener a mano pequeños utensilios.
En la parte más luminosa de la cocina, junto a la ventana, se colocó un comedor de diario, con una mesa de madera acompañada de una silla, en el mismo color y acabado, y un banco de madera pintada de blanco. Decorar el comedor de diario con muebles en un color y acabado diferente al del mobiliario de cocina es un recurso perfecto para que los dos ambientes queden visualmente delimitados. Fotografías: Klikk.