Porqué comprar mosquiteras para ventanas
Las mosquiteras son un elemento imprescindible para protegernos de los molestos insectos durante todo el año, aunque nos acordemos de ellas especialmente en verano, cuando son verdaderamente necesarias.
Sin embargo, instalar mosquiteras para ventanas, no es solo una cuestión de protección contra mosquitos, moscas, abejorros o avispas, sino que también son un elemento clave de confort térmico y acústico, así como un objeto decorativo más de nuestra casa.
Actualmente, existe una amplia gama de modelos con infinidad de propuestas, ideas, materiales, colores... que se adaptan a todos los bolsillos y estilos decorativos. Como no queremos que te pierdas entre tanta oferta, en este post vamos a centrarnos en cuatro tipos de mosquiteras y sus diferentes tipos de instalación: fijas, correderas, enrollables y plisadas. Seguro que entre ellas encuentras la que mejor se adapta a tus gustos y necesidades.
Mosquiteras fijas
Como su propio nombre indica, las mosquiteras fijas no se pueden mover, por lo que son la opción más sencilla y económica dentro de todo el catálogo de mosquiteras.
Son ideales para ventanas de difícil acceso, además de ser el tipo de mosquitera más duradera. Estas mallas metálicas o de fibra de vidrio se ajustan a las dimensiones de las ventanas y se fijan de manera segura para garantizar una protección duradera.
Están diseñadas para resistir las condiciones climáticas y el paso del tiempo. Al estar instaladas de forma permanente, no requieren un mantenimiento constante y no se desgastan fácilmente.
Entre las mosquiteras fijas, las que ofrecen mayores prestaciones son la realizadas a medida, ya que tienen una serie de ventajas que van más allá de la simple protección contra los insectos. Su ajuste perfecto, durabilidad, diseño personalizado, facilidad de mantenimiento, seguridad y mejora de la calidad del aire las convierten en una inversión valiosa para tu casa.
También ofrecen un plus de seguridad. Al estar instaladas permanentemente, actúan como una barrera física que dificulta el acceso de intrusos no deseados. Además, si levantamos la persiana hasta arriba y abrimos la ventana, la mosquitera puede actuar como protección para evitar que se nos caiga algo por la ventana si estamos muy cerca y también para una mayor seguridad de los niños y mascotas.
Mosquiteras enrollables
Este tipo de mosquitera son las más habituales en las casas, chalets, pisos. Resultan muy prácticas, ya que en invierno podemos tenerlas recogidas y protegidas, además de ocupar poco espacio. Funciona de la misma forma que un
La tela de estas mosquiteras se encuentran enrolladas en un carrete dentro de una estructura de aluminio llamada cabezal o cajetín, el cual está ubicado en la parte superior, muy similar al sistema de las persianas. La tela de las mosquiteras enrollables, de la cuál existen muchas variedades, bajará y subirá por unas guías situadas en los laterales. Para garantizar que la mosquitera enrollable queda colocada en su sitio, las guías suelen contar con unos anclajes en los que enganchar la mosquitera al bajarla.
La colocación, si lo permiten las medidas, se hace entre la persiana y la ventana, aunque en la gran mayoría de ocasiones no es posible y se realiza por el exterior de la persiana, y siempre necesitaremos una estructura lateral donde se quiera instalar. Estas posibilidades de montaje dependen del espacio disponible para el cajetín.
Si vives en una zona de mucho viento, no hay problema, existen mosquiteras enrollables a medida con sistema antiviento que te permiten proteger tu casa perfectamente. Este modelo de mosquitera enrollable incluye una serie de mecanismos que dificultan que el viento se cuele por la estructura de la mosquitera, generando mayor resistencia y aislando de una manera más eficiente el interior de la casa.
Mosquiteras correderas
Las mosquiteras correderas son muy parecidas a las fijas, aunque requieren de un carril existente para su instalación, por lo que son ideales para ventanas que también sean correderas. Son tan funcionales y versátiles que se pueden instalar en prácticamente todas las puertas y ventanas de cualquier vivienda o edificio.
Al parecerse tanto a las fijas, su instalación es muy sencilla, y permite la apertura parcial del hueco en el que esté colocada deslizando la superficie de la mosquitera horizontalmente.