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Pintar una estantería metálica oxidada

Publicado en Manualidades - Restauración de muebles por Cova Pendones

Cómo pintar una estanteria metalica

Ya se sabe que los muebles que habitan en las terrazas tienen una vida dura y no muy larga. Pero de vez en cuando agradecen unos pocos mimos para recuperar la imagen que tuvieron cuando estaban nuevos. Hoy os mostramos otra manualidad en un trix, que hemos hecho en estos días veraniegos con nuestro ayudante Iñigo. Esta estantería metálica de Ikea fue un top de ventas hace unos cuatro años, pues tenía, además, un precio imbatible (creo recordar que menos de 10 euros). Lamentablemente, he revisado el catálogo de Ikea y ya no la tienen.

Cómo pintar una estanteria metalica

Del gris al turquesa

Su color original era un gris oscuro y metalizado, o sea, que no era demasiado diferente a como estaba antes de que nos diera el arrebato por el color turquesa. Lo cierto es que lucía triste y desteñida, estaba oxidada por partes y nada de lo que colocaras en sus baldas tenía relevancia o distinción. Se había convertido en un contenedor de trastos.

Recuperar una estanteria metálica oxidada

Lo primero, eliminar el óxido

Como últimamente estamos en modo caribeño y tropicalista, nos fuimos a Decobloom (una tienda de pinturas que hay en la calle Fuencarral, en Madrid) y encargamos la pintura con el muestrario de Jotun, que cuenta con este turquesa "piscina Miami" que nos gustó mucho y se parece al tono que hay en la pared. La pintura es plástica especial para metal o madera, y se limpia con agua, otra ventaja. Lo primero que hicimos fue lavar la estantería con la manguera, antes de lijarla con lija de metal. Aquí nos tuvimos que aplicar, porque el óxido estaba por doquier, aunque no había llegado a corroer el metal.

Pintar una estanteria metálica

Dos manos de pintura son suficientes

Después de lijada, volvimos a limpiarla una y otra vez, hasta que dejara de soltar el polvo óxido. Una vez seca, le dimos dos manos de pintura turquesa, con gran facilidad, ya que cubría bastante bien. Nos ha sobrado pintura por si el año que viene necesita una nueva manita de pintura, ya que los inviernos en Madrid son muy duros. Este es el resultado: la estantería ha revivido, literalmente, y ahora todo lo que le pongas encima lo luce con gran distinción. Y no es solo que haya recuperado su encanto, es que juraría que ahora tiene más. Fotos: Decoratrix