Dormitorio blanco de estilo rústico y refinado
La semana pasada publicamos una preciosa casa de pueblo en Comillas, de la que os enseñamos la primera planta. Esta semana subimos al piso de arriba y nos adentramos en el dormitorio, del que hemos examinado cada rincón, cada detalle. Empezamos nuestro recorrido por el balcón de barrotes, que es un invitación, desde afuera, a entrar y no salir del dormitorio.
Las mismas claves decorativas de la cocina y del comedor se mantienen en el dormitorio: sencillez, pocos elementos y mucho blanco. El suelo de anchos tablones de madera se pintó con un revestimiento blanco de gran resistencia a las pisadas. El boutí reversible le aporta el toque de color a la decoración.
Al dormitorio se le incorporó el cuarto de baño para no compartimentar un espacio tan pequeño. Al fondo, las ventanas y la puerta que dan a la balconada de la fachada. En el suelo, un kílim de rayas marrones y mostaza delimita la zona de vestir de la habitación.
La bañera se encastró en un mueble de obra con hornacinas que amplían la zona de almacenaje. Al fondo a la derecha, tras un tabique, se esconde el servicio. Por ello, esta zona está 12 cm más elevada que el resto, para garantizar el desagüe de los sanitarios.
Otra zona del dormitorio, frente a la cama: un armario visto que incluye lavamanos, todo de obra y de diseño lineal. La alfombra delimita la zona de vestidor y la butaca capitoné antigua tapizada en terciopelo cámel sirve de mueble auxiliar a la hora de vestirse.
Otro de los dormitorios de esta planta, que da hacia la parte posterior de la casa donde hay un pequeño prado. Se ubicó en la zona baja del antiguo desván; por esta razón, las ventanas están al ras de suelo y el techo acusa mayor inclinación.
Detalle del mueble de obra, con originales lavamanos de piedra, de la tienda Molucas, ubicada en la Plaza del Corro de San Pedro, en Comillas (teléfono 942 722 163), al igual que la mayoría de las piezas y mobiliario de esta vivienda. Si ya nos había cautivado esta casita sin haber visto el piso superior, ahora es definitivo: me sumo al comentario que una de nuestras lectoras dejó en el post: ¡Quiero esta casa! Fotos: Santiago Moreno. Estilismo: Dafne Vijander.