Cómo organizar la ropa de cama
Una de las tareas del hogar que más pereza da es, sin duda, el cambio de armario. Con la nueva temporada toca guardar los juegos de cama de verano y sacar las fundas nórdicas. Algo que no tendría por qué resultar tedioso si no fuera porque lleva implícito organizar y ordenar los armarios. Para hacerlo bien y conseguir, no sólo mantener la ropa en perfecto estado, sino también optimizar el interior tanto de armarios como del altillo o canapé, es fundamental doblarlos correctamente. Siguiendo algunos consejos básicos, todo será más cómodo y sencillo.
Interiores bien aprovechados
Cuando los armarios se quedan pequeños, nada más práctico que contar con un canapé abatible. Lo ideal es crear compartimentos con cajas de diferentes tamaños para organizar todo tipo de prendas y ropa de cama. Recuerda que mantas y edredones son los artículos que más espacio ocupan.
Cómo poner un nórdico
Ahora, más que guardarlos, es el momento de sacar los rellenos nórdicos y meterlos en fundas. Otra tarea que también se nos resiste, especialmente cuando toca hacerlo sin ayuda. Aquí te dejamos un truco para colocar el relleno correctamente. Lo que realmente sería de gran ayuda es que las fundas contaran con más de una ranura como las de firma Resuinsa, que, además de la inferior, tienen dos aberturas superiores, una a cada lado, de diez centímetros cada una, por donde se pueden meter las manos y estirar del relleno.
Saca partido a un armario
Cuando la escasez de metros no es un problema, la mejor solución es destinar un armario a guardar la ropa de casa. Si no tienes un armario como el de la foto, no te preocupes. Tengas más o menos espacio, los trucos para optimizar el interior te servirán igual. Coloca las prendas por tipos y guárdalas juntas.
Sábanas, toallas y mantas, dobladas y apiladas. Los edredones mejor enrollados y, si fuera posible, dentro de una funda. Una solución muy práctica para que ocupen menos espacio es guardarlos en bolsas especiales que, con la ayuda del aspirador, envasan la ropa al vacío.
Agrupa las prendas
Cuando vayas a colocar las sábanas, procura doblarlas en cuadrado y guardarlas en el armario, apiladas. Organízalas siempre de la misma forma: por tamaños o por juegos, es decir, bajera ajustable, sábana y funda de almohada de un mismo conjunto juntas.
Guardar todas las sábanas de un mismo juego dentro de la funda de almohada es una solución para tener todas las piezas controladas. A la hora de guardar sábanas recién lavadas, colócalas en la parte inferior del montón.
Cajas y cestos
Son los mejores aliados tanto para ganar zonas de almacenaje como para organizar las prendas ya sea en el interior de un armario o bajo la cama. En este caso, para evitar que la fibra dañara la ropa, la cesta se forró con una tela estampada que le da un valor decorativo.
Por cierto, si pones un saquito de lavanda en cada cesta, que puedes hacer tú misma, además de aromatizar la ropa, conseguirás hacer frente al ataque de las larvas de las polillas.