Una silla recuperada
Al final...
Cuando vi la silla en un contenedor de la calle, lo tuve claro. Una lavadita y un retapizado y como nueva (demasiado fácil ¿a que sí?). Aunque no lo creáis, lo más complicado fue elegir la tela. Primero pensé en su ubicación en casa y, a partir de ahí, todo fue cuestión de tiempo.
Elegí una tela "complicada", seria, pero fácil de poner, bastante neutra, y para el retazo que necesitaba, me lo podía permitir. La que me gustó tenía un dibujo aplicado en terciopelo (59,75 € ml, 1,40 m ancho, poliéster-viscosa de Pepe Peñalver).
Así la encontré
Materiales que vas a necesitar
Tela, muletón, grapadora de tapicero, martillo, tachuelas y destornillador.
Paso 1.
Con un destornillador plano, retira el cordón de tachuelas oxidadas y la tapicería con su muletón.
Pasos 2 y 3.
A continuación, marca la tela seleccionada con una tiza y recorta, siempre dejando un margen de 3 centímetros aproximadamente. Haz lo mismo con el muletón.
Paso 4.
Pon la tela con su muletón y grápala con un pequeño dobladillo. En este caso, lo mejor es ir grapando un lado y su opuesto para conseguir un asiento más tensado.
Paso 5.
Una vez fijada la tela, se remata todo el borde con las tachuelas de zapatero.
Detalle final
¡Y éste es el resultado completo de nuestro trabajo para tapizar y renovar una silla! Fotografías: Decoratrix.