Recibidores sin luz natural
Los recibidores suelen ser espacios pequeños y oscuros, además de sosos y sin forma. Toda una oportunidad para crear una zona interesante con recursos muy sencillos. Por ejemplo, un diseño especial de papel pintado o un tono de pintura diferente y atrevido. ¿Y por qué no jugar con esa misma oscuridad y elegir tonos densos y elegantes? O dibujos sofisticados que incorporen brillos y metalizados. Como este papel inspirado en las hojas del bambú en tono marrón tabaco y verde musgo. Es de la colección Hyde Park de Casadeco.
Otra opción es elegir un diseño geométrico en tono sobre tono, la armonía de dos colores cercanos en lugar de contrastados le dará a nuestro recibidor una suavidad especial. Y los colores oscuros tienen a veces efectos muy táctiles, por ejemplo, algunos tonos de marrones nos acercan a la textura de la piel o del terciopelo. O decidirnos por un solo color. Como el azul petróleo que lleva apuntando como color-tendencia hace ya un tiempo y tiene gamas muy interesantes y un efecto envolvente y cálido.
En resumen, las habitaciones pequeñas y sin luz natural aguantan muy bien los colores oscuros, no tengas miedo con ellos. Pero cuidado al elegir la iluminación, instala luces bajas y puntuales, lámparas con pantallas de colores neutros –nunca blanco total– o focos halógenos bien dirigidos para lograr un efecto acogedor. Foto 2: Papel Tatoo de la Colección Togo de Caselio. Foto 3: Papel con textura de la colección Havana de Casadeco. Foto 4: Papel de la colección Residences de Casamance.