Ikea empieza algo nuevo
Con este sugerente reclamo, Ikea convocaba esta mañana a diversos medios de comunicación en su tienda de San Sebastián de los Reyes, en Madrid. Sabíamos que estaban involucrados cinco nombres de conocidos personajes: Rossy de Pama, Eva González, Carlos Moyá, Nuria Roca y Carmen Lomana. Pero, ¿de qué se trata "Empieza algo nuevo"? Ikea propuso en mayo a las cinco celebridades decorar un espacio en su tienda con muebles del nuevo catálogo 2014, que reflejara su personalidad, sus gustos, sus necesidades... Pero con limitaciones de espacio y, sobre todo, de presupuesto. Con la ayuda del equipo de interiorismo de Ikea, encabezado por Lorenzo Meazza, los cinco asumieron el reto con entusiasmo y mucha creatividad. ¡Y lo consiguieron! Decoratrix, además, tuvo la oportunidad y el gustazo de charlar con Carlos Moyá y con Rossy de Palma, que además nos contaron algunas cosas más... Pasen y vean...
Probablemente Carlos se enfrentó al reto más difícil: hacer una zona de descanso, ¡con tan solo 700 euros! El resultado ha sido realmente sorprendente: un espacio muy personal, sobrio, elegante, masculino... un pequeño refugio, rodeado de trofeos y objetos personales, una gran tele para ver partidos y una cómoda chaise longue para descansar. Para Carlos, que confesó ser ésta su primera incursión en el mundo del interiorismo, ha sido toda una experiencia, de la que se siente muy orgulloso, ya que el ajustado presupuesto no se lo puso nada fácil. En su casa de verdad, ahora mandan los niños, pero para decorarla, él y su mujer Carolina recurrieron a un interiorista que les ayudó en el proyecto. Amable y encantador, nos encantó conversar con él; todo un caballero dentro y fuera de la pista.
Con Rossy hablamos sentadas en su salón familiar, como si nos conociéramos de toda la vida. Como artista integral que es, le gusta la decoración, es manitas y bricolajera, pinta, esculpe, dibuja... De gusto ecléctico, siente pasión por el arte africano y oriental, ama las palmeras y el contraste entre el blanco y el negro, al estilo de su admirada Andrée Putman. Todo ello lo plasmó en su espacio, con tan solo 2.000 € de presupuesto: una pequeña sala de estar familiar con comedor, para compartir con sus dos hijos adolescentes, ver una película, cenar juntos, jugar al ajedrez... El punto emocional y dramático lo ponen las cortinas rojas a modo de telón teatral, un guiño a las artes interpretativas. Rossy, además de simpática, posee una gran sensibilidad artística, es creativa e ingeniosa. ¡Una auténtica Decoratrix!
El reto de Eva González consistió en proyectar el dormitorio de los sueños de cualquier mujer, un espacio romántico y relajante, a base de colores suaves (azul pastel, blanco, gris...), con zona de vestidor y cuarto de baño. Un refugio para descansar y desconectar, donde todo está en su lugar, especialmente la ropa y los zapatos, por los que confiesa debilidad, no solo por gusto personal sino también por su trabajo. Su espacio, de alrededor 30 m2, lo solucionó con solo 3.000 € de presupuesto.
A Nuria se le asignó un gran espacio familiar, de 46 m2, que debía integrar cocina, comedor, sala de estar y pequeña terraza. Una estancia de convivencia donde, sin embargo, cualquier miembro de la familia puede tener su espacio individual, o compartido en pareja. De línea moderna, pero cálida y acogedora, la decoración se proyectó sobre una base de color blanco, salpicado de tonos frescos como el verde y el naranja. Eso sí, Nuria tuvo la fortuna de contar con el mayor presupuesto: 4.000 €.
Finalmente, Carmen nos desveló algunos detalles de su elección a la hora de proyectar este salón, supuestamente ubicado en una buhardilla de ciudad. Elementos clásicos se mezclan con piezas más contemporáneas, con gran predominio del verde hoja, una manera de traer el verde cantábrico a la ciudad. La elección de las telas y tapicerías también fue clave para crear esta original decoración, llena de contraste y color. Un espacio para compartir con grupos reducidos de amigos, donde se manifiestan los gustos personales de Carmen (los libros, las fotografías, las orquídeas...), por tan solo 2.000 €. Desde luego, ¡todo un ejercicio de estilo para Carmen! Una replica exacta de estos espacios los podéis ver en todas las tiendas Ikea.