Ideas para decorar una cocina blanca con toques de color
Ladrillo visto, azulejos decorados, madera en acabados diferentes, pinceladas amarillas... Nada mejor para romper la monotonía de un espacio que añadir pinceladas de contraste. ¿Cómo decorar una cocina blanca con toques de color? Hace tan soló unos días nos colábamos en el salón de esta misma vivienda, un apartamento proyectado por el equipo de Widawscy Studio Architektury que cuenta con una maravillosa cocina con zona de comedor. Con una planta en forma de L, su distribución se organizó de manera perfecta.
Barra de desayunos
Diferentes colores y materiales contribuyen a delimitar los ambientes dentro de la cocina. En el pasillo, además de instalar el frigorífico, el horno y la cafetera integrable, se creó una zona de almacenaje con armarios lacados en negro. En frente, una barra de desayunos en madera maciza natural y unos taburetes verdes de estilo industrial. La pared se revistió con azulejos decorados, mientras que en el resto de la cocina se alternaron frentes blancos con muros de ladrillo visto.
Centro de cocinado
Del negro de la zona de almacenaje al blanco para las zonas de fregadero y cocción. Los armarios blancos, con el frente liso y sin tiradores, se prolongaron hasta formar una península que delimita la cocina propiamente dicha del comedor de diario.
Ladrillo visto
En esta cocina se crearon dos zonas perfectamente diferenciadas: una de trabajo en línea, y otra de comedor. La península acoge la placa de cocción con una campana de isla en forma de cubo. Además de esta barrera física, se jugó con la decoración de las paredes para marcar aún más el paso de una zona de la cocina a otra.
Comedor de diario
Se decoró con una mesa rectangular que combina patas de acero con un sobre de madera y cuatro sillas Eames Plastic Armchair DAR, de Charles & Ray Eames para Vitra, en color amarillo. El muro de ladrillo visto independiza la cocina de las escaleras que conducen a la primera planta de la vivienda. Lo mejor, el mosaico de azulejos hidráulicos que decora el otro lado del tabique. ¡Me encanta!