Decora con velas
Ya va siendo hora de empezar a pensar en poner nuestras casas un poco elegantes y navideñas. Seas partidaria o no de los adornos típicos de esta época, reconocerás que con un poco que te esmeres tu casa parecerá otra, como si acabaras de volver de un salón de belleza con un look totalmente nuevo.
Estoy pensando en aquéllas a las que les horroriza el árbol, las bolas, el Nacimiento, etc. Pero no por ello hay que renunciar a celebrar, decorativamente hablando, la Navidad. Por ejemplo, las velas son un recurso bello y eficaz para dar un toque sofisticado y acogedor sin utilizar ni un solo gramo de polvo dorado o de espumillón.
Rincón iluminado
Tampoco tienes que recurrir a candeleros específicamente navideños. Este rincón combina faroles oscuros de forja de aire marroquí y alguna pieza de metal. Puedes colocar las velas dentro y fuera de ellos y crear un pequeño bodegón a tu gusto.
Un solo candelero
Puede ser de metal envejecido y comprado en una antigua almoneda o mercadillo, como éste, colocado en el alféizar interior de la ventana y combinándolo con pequeños floreros de cristal y flores oscuras y sofisticadas.
Candeleros de cristal
Aunque los candeleros de cristal tallado tienen una magia especial. A mí me gusta mucho el efecto que crean, los destellos y reflejos provocados por las velas que se proyectan en las paredes y en los rostros de la gente.
Para ambientes modernos
Unos faroles de metal plateado colocados estratégicamente (sobre una mesa auxiliar, a los pies de algún mueble, en la esquina de una consola...) con velas oscuras: marrones, negras o grises. Y lo mejor de todo, no tendrás que retirarlos cuando pasen las fiestas, como mucho cambiar las velas. Fotos: Sia, Home-fashion y Tine K Home.