Ideas para crear zonas de comer en la cocina
Como tantas cosas en decoración, las ideas y soluciones dependen del espacio disponible. No obstante, hay múltiples fórmulas para comer en la cocina y crear una zona de comedor, ya sea integrado con una barra, en mesas exentas o uniendo el comedor a la cocina.
Barras de desayuno
Empezamos por esta modalidad que cada vez se utiliza más gracias a los nuevos sistemas de extracción que permiten comer en la isla o península cerca de la zona de cocción. En la imagen superior, se ha creado la zona de comer en la isla, con una encimera de madera formando una L. Lo original de esta propuesta es que la barra está por debajo de la encimera de mármol, con lo que se logra mayor intimidad.
En esta península adosada a una de las paredes de la cocina, se creó una amplia barra de desayuno con taburetes, que comparte espacio con el fregadero. Pero además, a la derecha, podéis observar que se aprovechó el ventanal para colocar otra mesa pequeña para comidas más distendidas.
Rescatamos esta cocina en color gris y naranja que ya habíamos publicado completa, porque nos gusta mucho la solución que han dado para la isla de cocción, cuya encimera sobresale unos centímetros para crear una mini barra con dos taburetes. La campana extractora es un modelo moderno que se inserta en el techo, para no interrumpir la visión general de la cocina.
En una cocina de estilo tradicional también es posible crear una amplia zona de desayuno dentro de la isla donde va encastrado uno de los fregadores. Las cocinas americanas suelen tener dos zonas de lavado: una para los platos y otra donde se manipulan los alimentos (lavar, escurrir...).
De esta manera, los alimentos no están en contacto con la suciedad de los platos y otras basuras. Si el tamaño de la cocina lo permite, es lo óptimo. Por eso, muchas islas incluyen un segundo fregadero. Por cierto, nos encanta el azulón de los taburetes que resta seriedad a la decoración un tanto clásica.
Una solución de obra es esta pequeña barra en forma de L con dos niveles, realizada en concreto y que aprovecha un murete divisorio de la cocina. Los taburetes se pueden poner a ambos lados de la barra.
Con mesa de comedor
Si no quieres poner isla o barra, siempre puedes optar por la tradicional mesa de comedor integrada en la cocina. El tamaño de la mesa irá en proporción al espacio de la cocina, como en estos tres ejemplos que te enseñamos. Un comedor integrado te puede servir de excusa para cambiar el código cromático de la cocina y darle un toque especial, como en esta imagen, donde la mesa rosa chicle rompe con el predominio del blanco y la madera.
Las cocinas distribuidas en forma de L son las que mejor acoplan una mesa de comedor, para así prescindir de una habitación destinada únicamente a comedor. Esta agradable cocina, donde predomina la madera del suelo y de los muebles de listones verticales, se amuebló con una mesa de metal blanco en alto brillo y sillas del mismo material en naranja, un color que favorece mucho en cocinas: es alegre y abre el apetito. Hay muchos alimentos que son naranjas, lo que identifica este color con la comida.
En cocinas más pequeñas, pero con una distribución adecuada, también puedes colocar una mesa de comedor, aunque de tamaño reducido o extensible. Aquí se escogió un modelo cuadrado negro, a juego con el suelo de pizarra de la zona de cocción y los taburetes vintage.
Comedor y cocina integrados
En las casas modernas, cada vez es más frecuente que el comedor comparta espacio con la cocina, o que se convierta en una zona intermedia entre la cocina y el salón, creando espacios diáfanos y muy amplios. En la imagen superior el comedor se colocó en la habitación anexa que, a su vez, también da al salón. Es muy importante que la decoración esté acorde en todos los espacios, unificada por el suelo y las paredes.
En este amplio salón, comedor y cocina, son la madera de pino y el acero inoxidable los materiales encargados en unificar este gran espacio. A pesar de tener mesa de comedor, también se creó una isla de trabajo con fregadero donde se puede comer.
Hemos escogido esta imagen de otro salón, con comedor y cocina integrados, porque nos ha gustado mucho la solución estética que han utilizado para dar unidad a todo el espacio. Para la cocina eligieron muebles de un impactante color verde césped, que llegan hasta la zona de comedor, donde se incluye, además, más madera. Un efecto de transición de materiales muy sutil y logrado. Todas estas cocinas las hemos encontrado en Dwell.
