Un salón moderno con piscina
Tener un salón de invierno y otro de verano es un sueño al alcance de pocos. A pesar de ello, hoy lunes vamos a empezar la semana soñando un poco mientras curioseamos este salón de verano donde se cuidó en extremo la decoración y los materiales integrándolos de tal forma que al abrirse los ventanales... ¡Voilá! se convierte en un salón con piscina.
Todo el frente que da a la piscina es un muro de cristal, con ventanas correderas cuyos perfiles permanecen invisibles al estar incrustados en el pavimento de madera de Merbau que se prolonga visualmente en la estrecha franja de terraza. En ella se cambió a un pavimento de exterior, una tarima de madera de Cumaru.
Pared de cristal
La integración entre interior y exterior es bien visible en esta foto, incluso los pilares estructurales de hierro se integraron pintándolos de un color plata como las carpinterías y dejándolos al aire mientras el cerramiento de cristal los envuelve.
La pared enfrentada al cristal es en parte una pared corrediza que comunica u oculta una pequeña kitchenette y una librería de gran capacidad. También se revistió de madera de Merbau como el suelo interior.
Interior acogedor
El estilo de este salón es moderno y masculino. Resulta acogedor pero no hay exceso de muebles, estos tienen formas sobrias y cómodas, predomina la piel y la madera y los colores son cálidos pero sofisticados: camel, tabaco, beiges y grises. El sofá es de la firma Temas V y la silla de despacho, tapizada en piel envejecida, es el modelo vintage de Hanbel.
Piscina desbordante
Entre la terraza y la piscina, una cinta de césped que aporta frescor y enmarca el rectángulo de la piscina. Ésta se diseñó como piscina desbordante aprovechando el desnivel del terreno y las hermosas vistas que rodean esta vivienda; sus límites se confunden con el paisaje y para ello se revistió de gresite en un tono verde seco. Toda la plataforma que la envuelve y que se prolonga en una zona de estar está revestida también de madera de Cumaru.
Zona de estar de la piscina
Se delimitó con una barandilla de cristal para no interrumpir las vistas. Los muebles son de aluminio lacado en blanco, material muy aconsejable para exterior ya que resiste bien la intemperie, la humedad y los cambios bruscos de temperatura.
Una amplia sombrilla de flecos aporta algo de sombra y resuelve la iluminación nocturna, ya que tiene un sistema de iluminación a base de Leds. Procede de la firma Sywawa. Este salón abierto a la piscina lo decoró el equipo de El Baúl. Fotos: Decoratrix.
