Tapizar una descalzadora
¿Tienes unas delcazadoras en tu dormitorio que deseas retapizar? Las descalzadoras suelen ser muebles pacíficos y un poco aburridos, se quedan calladas en las esquinas de los dormitorios y les gusta pasar desapercibidas. Pero a veces tienen siluetas muy refinadas y patas de avispa y si les cambias el retapizado pueden convertirse en un mueble nuevo y diferente.
Puedes combinar dos tapicerías de diferente textura y el mismo colorido. Por ejemplo, un terciopelo de este color fresa para los respaldos y un lino tapicero o un algodón con algo de textura en los asientos. Las patas en este caso, también van tapizadas de terciopelo, una idea muy novedosa.
Esta versión es muy elegante. Un tejido gris oscuro, juraría que es una antelina o una microfibra, (ese ante artificial que parece piel pero que se limpia fácilmente) y combinada con unos vivos en color rojo o fresa que remarcan la silueta de la butaca. Con el reposapiés incorporado se convierte en una pequeñita chaise-longue, muy apetecible para robar algunos momentos de descanso en la intimidad de nuestro dormitorio.
Y aquí la versión más informal: cada butaca tapizada de un color. Elige dos colores que se complementen, o bien que contrasten. ¿A que una vez tapizadas así apetece llevártelas al salón? Pero eso es un post para otro día: "Cómo cambiar de sitio los muebles en casa". Para el de hoy nos hemos inspirado en los muebles tapizados de la firma belga Vanhamme, un clásico de la tapicería a medida y el taller tapicero más antiguo de Bélgica.