Comida en el jardín para despedir tus días de vacaciones
¿Te quedan pocos días de vacaciones? Despídete a lo grande sorprendiendo a tus familiares y amigos con una comida en el jardín. Te damos las pautas para ser la anfitriona perfecta: no tienes que comprar muebles nuevos, puedes aprovechar los que tienes en el comedor para organizar una mesa de despedida de verano.
El mobiliario de madera o de hierro pintado encajará perfectamente. Decora e ilumina al mismo tiempo el jardín con unos farolillos de colores. Cuélgalos de los árboles (o aprovecha la estructura de una sombrilla). Como lo más seguro es que no cuentes con ningún enchufe cerca, busca farolillos preparados para velas. Incluso, puede que tengas que encenderlos si la reunión se alarga.
No prescindas del mantel
Lo bueno de dar una comida al aire libre es que tienes licencia para utilizar vajillas y cuberterías de colores llamativos e, incluso, para combinar modelos diferentes. Los diseños de plástico son perfectos para estas ocasiones informales. Elige un mantel estampado en colores frescos y busca servilletas entonadas. Sería ideal contar con una mesa extra donde colocar todo lo necesario para la comida y así evitar los paseos al interior de la casa.
Flores naturales recién cogidas
¡Qué no falten los centros de mesa con flores naturales para decorar la mesa! Seguro que en muchos lugares de vacaciones los rosales están aún repletos de flores.
Improvisa jarrones con botellas de cristal
En una comida al aire libre la presentación de la mesa sí importa. No descartes poner un toque romántico con vajillas clásicas y copas del cristal del mismo estilo, aunque el resultado final quedara más actual y dinámico si combinas piezas de diferentes cristalerías. Recupera atractivas botellas de cristal que tengas en casa para utilizarlas a modo de improvisados jarrones. Coloca en cada una de ellas una flor. Como ves, no es necesario complicarse la vida con arreglos muy sofisticados.
Elige asientos cómodos
Y después de comer, nada más saludable que una pequeña siesta; diversos estudios demuestran sus beneficios para la salud. Así que, hazte con un asiento confortable y colócalo en un rincón bajo la sombra o bien una hamaca colgada de los árboles. ¡Habrá peleas por ocupar este asiento!
Sobremesa relajada
Unos disfrutan de la sobremesa, otros se echan la siesta y seguro que alguno de tus invitados busca un rincón íntimo y tranquilo donde seguir relajándose. Una tumbona que tenga el respaldo reclinable invitará a más de uno a entregarse a su lectura de verano. ¡Qué no se te escape ni un detalle! Fotografías: Period Living.
