Hotel Royal Palm Marrakech, en Marruecos
¿Qué hace que un hotel de lujo sea diferente a otros hoteles de lujo? La clave está en el conjunto de cualidades que se reúna bajo el concepto lujo: el enclave, las instalaciones, la decoración, la atención, la comida, la tranquilidad, el bienestar... Cuando un hotel acumula todas estas características, más que un hotel de lujo es un lujazo de hotel. Y esto es lo que ha logrado el Hotel Royal Palm Marrakech, un extraordinario resort de 6 estrellas, ubicado en una extensa parcela de 231 hectáreas pobladas de centenarios olivos, a los pies del Atlas y a tan sólo 20 km de Marrakech.
El Hotel Royal Palm Marrakech pertenece al grupo hotelero Beachcombers, que cuenta en su haber con los hoteles de playa más espectaculares de Isla Mauricio y Seychelles. Para su primera incursión "tierra adentro", han elegido este idílico entorno, con el fin de crear un paraje de descanso alejado del tradicional concepto de hotel turístico. Con tan solo un año de vida, el Royal Palm Marrakech ya ha sido elegido miembro de The Leading Hotels of the World, asociación que reúne a los 430 hoteles más lujosos y exclusivos del mundo.
El hotel es un sofisticado complejo compuesto por 124 suites y 10 villas, tres restaurantes, dos bares, piscinas, un sofisticado spa, un Kids Club, un centro deportivo y un impresionante campo de golf. Todo ello está organizado en una amplia extensión, rodeado de palmeras, olivos, naranjos y arbustos de lavanda. Como curiosidad, apuntar que el aceite que se consume en el hotel está extraído de sus olivos, y tienen previsto, en un futuro próximo, sembrar también sus propias frutas y hortalizas.
La entrada y las zonas comunes
La decoración está inspirada en la cultura bereber, con elementos arquitectónicos y materiales autóctonos marroquíes, como no podía ser de otra manera. Uno de los puntos fuertes de la filosofía del Royal Palm es potenciar las riquezas naturales de la zona, con total respeto por el entorno. Muchos de los ornamentos de la decoración (solados, lámparas, rejerías, carpintería...) están realizados por las virtuosas manos de artesanos de la zona.
Restaurantes y bares
Sin duda, una de las exclusividades del Royal Palm es su exquisita cocina, capitaneada por Philippe Jourdin, "Meillerur Ouvrier" de Francia en 1993, quien dirige los tres restaurantes: Le Caravane, con un menú de comida internacional; L'Olivier, el restaurante junto a la piscina que sirve comidas ligeras; y Al Aïn, donde se ofrece lo mejor de la gastronomía marroquí. Además, cuenta con dos espectaculares zonas de bar y terrazas. La distribución de las zonas de restauración están cuidadosamente pensadas para evitar aglomeraciones en las horas clave de la comida.
Las habitaciones
Todas las estancias tienen vistas exteriores que dan al campo de golf, por lo que cuentan con zonas abiertas o terrazas para disfrutar del excelente clima de la zona. Hay 6 tipos de suites, que se categorizan por su tamaño. Las más pequeñas (Junior Suite) tienen "solo" 72 m², y están pensadas para una pareja y un niño. El resto de las suites van ampliando sus necesidades dependiendo del número de huéspedes, hasta llegar a la Luxury Family Suite, de 198 m², para dos adultos y 4 niños.
Como es de esperar en un hotel de 6 estrellas, las comodidades y servicios que ofrece cada habitación son máximas (wifi, televisor por cable, aire acondicionado...). Su decoración es una interpretación contemporánea de la estética marroquí, en la que introducen piezas artesanales (como las alfombras bereberes) y revestimientos tradicionales, como el beijmat o el mármol de los cuartos de baño. Las tonalidades ocres y tierras, con toques especiados, favorecen una decoración elegante y sin estridencias, que invita a la calma y al descanso.
Las suites presidenciales
No podemos evitar detenernos en estos espectaculares aposentos, de 310 m2, que son auténticos apartamentos de lujo. Cuentan, en la zona central, con recibidor, zona de estar, comedor, cocina y una amplia terraza. A ambos lados, se encuentran sendas habitaciones con sus respectivos cuartos de baños y sus propias terrazas privadas.
Prince Villas
Además del cuerpo central del hotel, el Royal Palm cuenta con 10 villas, fantásticas viviendas de 741 m², con salón, comedor, cocina, dos suites y piscina privada. Un espacio ideal, decorado con los exquisitos elementos de la artesanía marroquí, y con todo tipo de servicios y comodidades: baño turco, mayordomo exclusivo, servicio de lavandería, piscina climatizada... ¡Como para quedarse a vivir ahí todo el año!
Kids Club
Las guarderías tradicionales han sido reinterpretadas en el Royal Palm por el Kids Club, un espacio muy especial, decorado en color azul turquesa, muebles de madera natural, amplios ventanales y juguetes ecofriendly (como las graciosas ovejas). Otra ventaja es su horario, de 8 de la mañana a 12 de la noche, por si los padres quieren hacer una excursión fuera del hotel. Además, cuentan con servicio de baby-sitter.
Las piscinas y el Sport Center
Alrededor del hotel se suceden 2.000 m² de piscinas, enmarcadas con cuidadas áreas de césped. El agua de la piscina, climatizada todo el año, se mantiene con ozono, y no con cloro, lo cual es mucho más ecológico y saludable. También el Sport Center cuenta con una piscina semiolímpica, además de canchas de tenis, squash, gimnasio, estudio de Pilates y personal coaching, entre otros servicios. ¡Los amantes del deporte no darán abasto!
El campo de golf
El Hotel Royal Pam está especialmente orgulloso de su campo de golf de 18 hoyos, y no es para menos. Además de estar en un lugar espectacular y perfectamente cuidado, su diseño fue encargado a Cabell B. Robinson, toda una autoridad en la materia. Un total de 75 hectáreas de césped cortado a cepillo, con obstáculos de agua, trampas de arena y fantásticas zonas ajardinadas.
Spa by Clarins
He de confesar que, a estas alturas del recorrido, estoy tan agotada de desear transportarme a este hotel, que necesito recalar en el Spa by Clarins, para un cierre glorioso. Creo que las imágenes hablan por sí solas, aunque aún hay más: en sus 3.500 m², se pueden encontrar varios espacios donde la firma Clarins ofrece tratamientos específicos con sus productos. Además de masajes, pedicura o peluquería, se puede disfrutar de los ricos rituales de belleza marroquíes, baños turcos, hamman, sauna, baños de hielo... Y es aquí donde desconecto de verdad, después de quedar absolutamente prendada de este hotel tan fuera de serie, que está inspirado en el Paraíso Terrenal. Si voy, no querré volver...
