Un fantasma volador en la escalera

¿Tienes poco tiempo para hacer la decoración de Halloween? Hace unos días, ya os enseñamos unos pocos detalles temáticos para decorar la casa. Había brujas, calaveras, arañas, calabazas... Pero, seguro que echabais de menos un personaje que no puede faltar en esta fiesta: un fantasma. En este sencillo paso a paso, podrás elaborarlo en menos de media hora con pocos materiales y baratos.

Para hacer este fantasma que parece flotar en el aire, necesitarás una pelota de espuma (poliespan o corcho), alambre moldeable, hilo de pesca, una aguja de punto o una brocheta fina (cuanto más finas, mejor) una cartulina negra, un trozo de tela de gasa blanca y pegamento.

Preparar la cabeza el fantasma

Lo primero que tenemos que hacer es atravesar la pelota con la aguja, asegúrate de que sea muy fina para que el alambre se quede sujeto. Dobla el extremo del alambre y pásalo por el agujero hasta atravesar la pelota. Una vez atravesada la pelota, abre un poco el extremo formando una "L" , así el alambre no se saldrá del agujero.

Cortar la tela

Para hacer "la sábana" del fantasma, abre la tela y con unas tijeras bien afiladas, realiza cortes asimétricos por todos los bordes, incluso un poco deshilachado para darle sensación de tela vieja. Una vez que hayas cortado toda la tela, pásala por el centro cubriendo la cabeza del fantasma.

Ojos para el fantasma

Dibuja dos pequeños círculos ovalados en una cartulina negra, recórtalos y pégalos al fantasma a modo de ojos. Si quieres, también puedes hacerle una boca "terrorífica" con un círculo más grande igualmente ovalado como si estuviera diciendo "Boo". Por último, atar el hilo al alambre para poderlo colgar y que parezca que está flotando.

¡Ya tienes el fantasma! Ahora solo tienes que colgarlo en un rincón donde se mueva cuando alguien pase a su lado, así dará sensación de que está volando por la casa. Esta manualidad la hemos visto en HommerMaker.