Estilo nórdico: razones por las que nos gusta tanto
Cálidas, modernas, elegantes y luminosas. ¿Será por eso que tanto nos gustan las decoraciones nórdicas? En The Guardian hemos descubierto esta maravillosa vivienda situada muy cerca de Copenhagen y, una vez más, caemos rendidas al particular encanto del estilo escandinavo, sin duda uno de los triunfadores de los últimos años. Este estilo decorativo es una opción ideal para apartamentos juveniles, no sólo por la mezcla de diseños alegres y modernos, sino también porque es posible decorar a unos precios muy económicos.
El estilo propio está en alternar mobiliario de firmas de diseño con piezas asequibles. En este salón, los asientos que forman la zona de estar, tanto el chaise-longue como el sofá, que bien podrían ser de Ikea, se combinaron con muebles y complementos algo más exclusivos, como la mesa de centro de Carl Hansen & Son y la lámpara de pie blanca, de la firma italiana Artemide. Nos lo dicen los expertos en moda: la alta moda y el low cost se unen, prendas de Zara, Mango, H&M, incluso todo tipo de adquisiciones en mercadillos y tiendas de segunda mano, se alternan con unos buenos zapatos o un bolso de firmas de lujo. Pues en decoración, lo mismo.
Los espacios amplios y despejados es otra de las características de las decoraciones nórdicas. En este caso, salón y comedor no comparten el mismo espacio, como en la mayoría de las viviendas que conocemos, sino que se ubicaron en habitaciones diferentes. Una puerta doble de madera maciza laqueada en blanco, con cuarterones de cristal transparente, comunica ambas estancias. La luz fluye sin problemas.
El comedor se compone de la mesa Lambda de Design Nation y seis sillas Grand Prix de Fritz Hansen. Esta silla fue diseñada en el año 1957 por el arquitecto Arne Jacobsen para Fritz Hansen. Premiada por el diseño, su nombre se debe al premio más grande de la Triennale en Milano: el Grand Prix de 1957, donde Arne Jacobsen demostró una vez más sus dotes visionarias. Grand Prix fue y es aún una silla de diseño reconocida internacionalmente y muy pedida. Compuesta de chapa de madera moldeada, disponible en diferentes colores y tamaños, el armazón de Grand Prix está elaborado a partir de tubo de acero de 14mm.
Los nórdicos son especialistas en aprovechar los elementos decorativos secundarios y los textiles para aportar vida y color al espacio con tonos llamativos que destaquen del fondo principal. Además, lograr ambientes cálidos, acogedores, luminosos, donde primen valores como la funcionalidad y el orden es su objetivo. Mira qué forma tan sencilla, decorativa y práctica de decorar el recibidor.
El estilo nórdico tiene como objetivo fundamental lograr estancias cálidas, confortables y luminosas, para contrarrestar la carencia de luz solar que es habitual durante gran parte del año en los países nórdicos. Para dotar al dormitorio de esa luminosidad tan anhelada, los revestimientos de suelos, paredes y techos aparecen en colores neutros. El mobiliario, de diseños sencillos y líneas rectas como es habitual en todo el estilo, y los tejidos, que añaden el toque de color sin caer en las estridencias, transmiten calidez. No faltan las alfombras, y las camas se visten con abundante ropa: fundas nórdicas, mantas y, sobre todo, multitud de cojines, mejor si, además, presentan diversos estampados y colores.
El estilo nórdico es especialmente adecuado para las habitaciones infantiles, pues los colores claros resultan muy relajantes y apropiados para crear un buen ambiente en el dormitorio de los niños y en especial en la de un bebé. El color se introduce sobre todo a través de los complementos textiles, como cortinas y alfombras, la ropa de cama, la colcha, los cojines… y demás detalles. Fotografías: Heidi Lerkenfeldt.
