Desayunos y cenas al aire libre, epílogo de verano
Que sí, que ya se acabaron las vacaciones para muchos de nosotros. El verano se nos ha ido sin darnos ni cuenta pero yo creo que, al contrario de lo que cantaba el grupo Amaral, "Sí quedan días de verano" que podemos disfrutar en la ciudad.
Desayuno en el balcón
A mí, por ejemplo, me encanta aprovechar los primeros rayos de sol que calientan a primera hora de la mañana para desayunar cómodamente en el balcón. Me cabe lo "justito" una mesa y un par de sillas plegables, pero te puedo asegurar que es un buen método para superar el dichoso síndrome postvacacional, ese que dicen que padecemos los que vivimos y trabajamos en las grandes ciudades. Velador, silla y menaje de Habitat.
Veladas en la terraza
También puedes alargar el verano organizando alguna velada que otra en la terraza. Deja puesta la sombrilla, así evitarás ese fresquito molesto que empieza hacer por las noches en los últimos días de verano.
Para darle una aire lúdico-veraniego a la cena, ilumina la zona con una guirnalda de luces (nunca las que tienes guardadas para Navidad, da mal "rollito") y clava algunas antorchas en las macetas o en los arriates.
Un consejo: por muy a gustito que estéis, no alargéis mucho la velada que al día siguiente "habrá que ir a trabajar". Sombrilla, iluminación y mobiliario de Habitat.
Una barbacoa de despedida
Qué mejor forma de decir adiós a los largos días del verano que programar una cena familiar o de amigos en torno a una deliciosa parrillada. Esta mesa cuenta con un hueco en el centro para colocar la barbacoa. De esta forma, los comensales podrán sentarse alrededor y preparar deliciosos platos sin tener que moverse del sitio. Tú solo tendrás que sondear las preferencias de tus invitados y elegir platos sencillos de cocinar.
