Casa en el campo de piedra y madera
Una casa en el campo para descansar los fines de semana, eso era lo que anhelaba Amy Mellen, directora creativa Calvin Klein Home, cuando se puso a buscar un lugar tranquilo lejos de la agobiante ciudad de Nueva York. Y lo encontró en un bello paraje del condado de Dutchess. Se trata de una cabaña de pescadores rodeada de árboles y cerca de un arroyo cristalino.
Una cuidada reforma, planteada y realizada en gran parte por la propia Mellen, ha transformado esta pequeña cabaña en una casa luminosa y moderna, de líneas limpias y elegantes muebles de estilo contemporáneo, donde destacan los amplios ventanales que se abren al paisaje exterior, elementos que le dan un nuevo significado a lo que todos conocemos como un refugio rústico.
Zona de estar con chimenea
De la construcción original llevada a cabo en 1965 por Sherman Chase, constructor que levantó numerosas cabañas en la zona utilizando materiales autóctonos, quedan los suelos y las vigas de madera de pino. Nada más traspasar la puerta de entrada aún pueden verse partes de la pared de piedra original en la que está incrustada la chimenea.
Salón rústico en tonos tierra
La mayoría de objetos decorativos, así como parte del mobiliario y complementos son piezas adquiridas por Mellen en los países que visita debido a sus numerosos desplazamientos por cuestiones de trabajo y que ella intercala sabiamente con numerosas piezas procedentes de las colecciones de Calvin Klein Home.
La zona de tertulia del salón se amuebló con dos sofás y una silla de Calvin Klein Home, mientras que los cojines se confeccionaron con telas compradas en Tailandia. Sobre estas líneas, una mesa de caballete de 1760 que perteneció a los padres de Mellen sobre la que descansan una lámpara de mercadillo y varios objetos decorativos realizados por la diseñadora.
Comedor, amplio y luminoso
En la zona de comedor destacan los amplios ventanales que se abren al paisaje exterior, siempre remarcados por unas gruesas molduras de madera de pino oscurecido. La amplia mesa que preside el espacio está hecha con madera molida de un cerezo que se tuvo que talar debido a que las raíces empezaron a invadir parte de la casa. Sobre el suelo de pizarra se colocó una alfombra comprada en Marruecos.
Una cocina hecha a medida
La cocina, por su parte, fue la que sufrió la mayor remodelación de toda la casa. Se amplió el espacio y todos los muebles, deteriorados por el paso del tiempo, se cambiaron por otros más modernos y acordes con la necesidad de la dueña, excelente cocinera de platos exóticos inspirados en sus frecuentes viajes. En el centro se colocó una mesa de nogal americano, rodeada por sillas y bancos de Calvin Klein Home, todos los armarios están realizados a medida, donde se intercalan los electrodomésticos en color plateado.
Tonos claros para el dormitorio
Los tonos claros, con azules, blancos y tostados, protagonizan la decoración del dormitorio principal. El tono azul claro de las paredes y las molduras de ventanas y puerta, pintadas en blanco, parecen atrapar una luz casi mediterránea que inunda toda la estancia. La cama y la ropa de cama son de Calvin Klein Home. Como mesilla, se ha dispuesto un conjunto de mesas nido inglesas, fabricadas en madera de olmo. El escritorio, situado debajo del ventanal, está hecho con madera de la zona y la silla se compró en un mercadillo.
Amy Mellen posa en el porche
Un espacio cubierto de nueva construcción que ella misma diseñó a su gusto. Para cubrir el suelo se utilizó la piedra de la zona y rocas desenterradas de su parcela con las que se realizó un murete de piedra sobre el que descansan los troncos que sujetan el techo inclinado. Vía: Elle Decor.