Trucos para disimular las humedades de la pared

Tras las lluvias torrenciales que han caído en las últimas semanas, es más que probable que muchas paredes presenten humedades que pueden ir a más. Antes de recomponer el entuerto, es necesario que revises lo que cubre tu seguro, y si no estás convencido, puedes calcular el precio del seguro de tu hogar en páginas especializadas. Porque lo primero de lo primero será solucionar el origen de la humedad. 

Hecho esto, ya puedes proceder a arreglar la pared y, de paso, le das una vuelta a la decoración. No hay mal que por bien no venga. He aquí unas ideas infalibles.

La pintura, ese gran aliado

Tras sanear la pared, llega el momento de decidirse por el color de la pintura. Innova con diseños alegres, que le den un toque especial a la decoración: dibujos geométricos, círculos, cenefas, rayas... A nosotros nos ha encantado la pintura decorativa de la imagen de arriba. También puedes optar por combinaciones de color contrastados, como en esta habitación, en rosa, blanco y amarillo. Son las propuestas cromáticas de Bruguer para este otoño. 

Papeles pintados 

Los papeles pintados tienen la ventaja que cubren cualquier imperfección, sobre todo, si su dibujo es irregular. El tie-dye (teñido anudado) vuelve a estar de moda en prendas de vestir y, ahora, también llega a la decoración (colchas, cojines, mantas...), como muestra este papel pintado, que camufla todo tipo de irregularidades, cambios de color y pequeños desperfectos. 

Papel pintado y friso de madera

Si la zona inferior de la pared es especialmente sensible a las humedades, puedes colocar un friso de madera (decorado con pintura o molduras), que proteja todo el perímetro de la habitación. El resto de la pared puedes empapelarlo con un papel pintado elegante, que le dará mayor presencia decorativo al espacio. Éste es de Cole&Son.

Vinílicos para proteger zonas de humedad

Es una solución práctica y decorativa que cada vez utilizan más los interioristas, gracias a los nuevos acabados de los papeles vinílicos, con texturas que imitan tejidos. El resultado, como lo muestra esta imagen de un proyecto del estudio NoboHome, es espectacular. Además, esta zona de lavabo se revistió con losetas porcelánicas blancas, que refuerzan la protección y enmarcan la zona.

Molduras decorativas

Otro de los recursos más utilizados por los profesionales son las molduras decorativas, de madera, escayola o, lo último, de resina (mucho más ligeras y fáciles de colocar). Están especialmente recomendadas para superficies amplias, que han sufrido el paso del tiempo y quieres disimular. Colocas las molduras, pintas...y voilà. El resultado es ordenado, limpio e indudablemente elegante.

¡A la vista!

Si tras las humedades tienes que picar las paredes y aparece un muro de ladrillo antiguo a la vista... ¡ni se te ocurra revocar de nuevo! Has dado con una joya arquitectónica, lo mismo que si aparece una viga o columna de hierro. En estos casos, lo mejor es aprovechar estos paramentos y dejarlos tal cual. Su  belleza tiene un poder decorativo inigualable. 

Si quieres más inspiración, puedes hacerlo en nuestra sección Ideas para decorar paredes.