Soluciones para organizar zapatos

Stilettos, peep toes, mules, sandalias, zuecos, slippers, bailarinas, cuñas, botas, botines… ¿Cuántos zapatos atesoras? Muchos o pocos, el calzado es uno de los complementos que más ocupa en el armario. Por eso, en muchas ocasiones, organizar zapatos, dónde y cómo guardarlos, se convierte en un auténtico problema: ¡no vale en cualquier sitio, ni de cualquier forma! Lo suyo es dar con soluciones que te permitan tenerlos ordenados, perfectamente localizados y evitar que se estropeen.

Para ayudarte, hemos reunido ideas de almacén decorativas y prácticas que seguro te inspirarán. ¿Qué tal si reservas una bonita vitrina para guardar tus zapatos preferidos? Pero además de los clásicos del orden, como muebles y cajas, aquí vas a encontrar propuestas originales y creativas. Fotografía: Whowhatwear.

Muebles zapateros

Hazte con un mueble de poco fondo que puedas colocar en cualquier rincón sin miedo a que obstaculice el paso. Busca un diseño acorde con la decoración de tu casa, que quede estupendamente tanto en el salón como el dormitorio o el recibidor. En la foto, zapatero Hemnes, de Ikea, que mide 107 x 22 x 101 cm y tiene una capacidad para ocho pares de zapato como mínimo. En este caso, se colocaron dos.

¿Por qué no aprovechar el espacio que queda debajo de una ventana con un mueble a medida? De esta forma, aprovecharás al máximo el espacio disponible, no sólo de la estancia donde vayas a colocarlo, sino también del interior del armario. Sin duda, las bandejas extraíbles son la mejor solución, además de un accesorio muy práctico y cómodo para acceder a todos los zapatos.

Cajas para organizar zapatos

¡Zapatos ordenados a la vista! Con estas cajas transparentes, además de hacer lucir tus zapatos favoritos, no tendrás que desordenar todas tus cajas hasta que encuentres el par que buscabas. Llevan una trabilla para que resulte más fácil tirar de la caja y sacarla. Son el modelo Hyfs, de Ikea.

Otra forma de localizar de un vistazo los zapatos que buscas es decorar las cajas con fotos del calzado que contienen. Para que esta idea resulte decorativa, procura que todas las cajas sean iguales, del mismo color y material.

Si las cajas van a estar a la vista de todos, sustituye las cajas originales -que serán cada una de un tamaño y de un color- por modelos idénticos para transmitir sensación de orden. Para conocer el contenido de cada caja, identifícalas con etiquetas. Fotografía: Ivy Lane.

Con molduras decorativas en la pared

¿Has pensando en el potencial de almacenaje que tienen las paredes? Conviértelas en expositores de los zapatos que uses más a menudo o de temporada con ayuda de unas molduras decorativas. Si quieres darle un valor decorativo a esta idea, reserva esta nueva zona de almacenaje para tus zapatos VIP, que además estén perfectamente limpios y cuidados. Fotografías: Martha Stewart, Apartmenttherapy e Inmagz.

En este caso, en lugar de molduras decorativas, se instalaron toalleros de barra para ordenar los zapatos de tacón. Fotografía: Nina Holst a través de Stylizimoblog.

Baldas y estanterías

¿Y destinar una estantería para guardar los zapatos? Si optas por baldas o estanterías modulares, te resultará más fácil adaptar la composición tanto al espacio disponible como a tu colección de zapatos. Ambas soluciones tienen la ventaja de que permiten ir ampliando la composición según vas comprando calzado nuevo. Cuando no existen problemas de espacio, es posible colocar una estantería grande, como la de la foto, que está dividida en estantes cuyas dimensiones se ajustan perfectamente a un par de zapatos. Recuerda que los diseños milimétricos transmiten sensación de orden. Fotografias: Whistles y Decoware.

Escaleras

Las escaleras también se pueden convertir en valiosas zonas de almacenaje. La verdad es que aprovechar el hueco de la escalera o los peldaños para crear unoscajones donde guardar calzado, ropa o libros es una magnífica solución cuando escasea el espacio. Una idea DIY: recicla una escalera de mano que ya no uses en unpráctico y decorativo expositor de zapatos. Te ayudará a colocar el calzado en un lugar a la vista, además haciéndolo de un modo original.