Salón en gris y amarillo: una mezcla serena y equilibrada

Gris y amarillo. ¿Apostarías por este dúo cromático para decorar tu salón? Para aquell@s que crean que es una mezcla extraña, este salón en gris y amarillo es una muestra de que estos dos colores combinan a la perfección: el amarillo atenúa los colores fríos y el gris compensa la intensidad del amarillo. El equipo de Spazio 14 10 recurrió a esta gama de colores para decorar el salón-comedor de este apartamento italiano: el gris es el color predominante y, después se añadieron pinceladas amarillas en complementos y piezas del mobiliario.

Al combinar detalles amarillos con superficies en blanco y pinceladas negras, no sólo se logró romper la monotonía de las tonalidades grises, sino que, además se aportó un toque moderno y fresco a la decoración.

Si además combinamos muebles de línea actual con piezas clásicas en maderas nobles o de inspiración vintage, conseguiremos una decoración personal, con estilo.

La combinación gris y amarillo encaja con todo tipo de materiales, desde madera y acero hasta cristal, mimbre o plástico. El salón-comedor es la estancia de la casa donde mejor encaja esta mezcla de texturas y materiales, si bien conviene reservar el amarillo para complementos y muebles auxiliares (cojines, textiles, flores, sillas del comedor, etc.) y jugar con diferentes tonalidades de gris en tapicerías y paredes para dar más riqueza y potencia visual a la estancia.

No nos olvidemos del blanco. Con este color, los ambientes decorados en gris y amarillo ganarán un aire moderno y bohemio y además, conseguiremos recrear una atmósfera serena y relajada. Las paredes grises, en cualquiera de sus tonos, transmiten calma y, debido a su neutralidad, funcionan bien con colores tan vibrantes como el amarillo. Fotografías: Spazio 14 10.