Revestimientos cerámicos en la cocina
Durante las fiestas navideñas, la cocina se convierte en la mejor base de operaciones. Allí se desarrollan algunas de las actividades más señaladas: preparar cenas y comidas en compañía, nos ayuda a estrechar lazos. La cocina se llena de vida. El momento de los preparativos siempre genera un poco de estrés: cacerolas, ingredientes y, en ocasiones, muchas manos que hay que organizar.
La cerámica se convierte aquí en una aliada: por su baja porosidad no absorbe manchas en su superficie y su limpieza resulta fácil, rápida y cómoda. Para el suelo, los pavimentos antideslizantes garantizan la seguridad ante resbalones provocados por los líquidos vertidos; sobre todo si hay niños “ayudándonos” con el postre navideño. Arriba: pavimento Neocountry, de Apavisa, en 60 x 60 cm.
La cocina plasma nuestra personalidad, por eso cada una es especial. Clásicas, modernas o rústicas; llamativas y coloristas o de líneas puras y tonos neutros; grandes, que se prolongan hasta el comedor, o cocinas mini. Para cada estética y cada necesidad, es posible encontrar los azulejos y pavimentos cerámicos más adecuados. Foto 1: azulejo biselado, en 10 x 20 cm, en blanco brillo; pertenece a la serie Retro de L'Antic Colonial. Foto 2: revestimientos Rústica, de la firma Keros, en 10 x 10 cm y el listel, en 2 x 10 cm.
Las tareas que se desempeñan en la cocina requieren revestimientos resistentes y fáciles de limpiar. En un espacio con humos, manchas de grasa, salpicaduras de agua y olores muy intensos, la decoración debe ser eminentemente práctica. Los revestimientos cerámicos se renuevan con atractivas gamas de color, formatos especiales (se imponen las piezas de gran formato) y superficies con volúmenes, que aporten dinamismo y riqueza visual.