Perchas para pantalones, marcos originales
Tampoco se ha seguido ninguna norma a la hora de colocar los cuadros: ni eje central, ni alineados ni guías verticales que valgan. Las láminas, de distintos formatos y tonalidades, se han dispuesto de manera, más o menos, aleatoria, en función, eso sí, de la inclinación del techo. ¡Y bien equilibrada que ha quedado la composición!
Y si la lámina en cuestión tiene un formato alargado, nada más sencillo que colocar dos perchas, una en cada extremo, para evitar que el papel, con el paso del tiempo, acabe enrollándose por debajo. Vía: Apartment Therapy.