Mama Campo, restaurante y colmado en el centro de Madrid

Mañana empieza oficialmente el otoño. Aunque, seguramente, el verdadero otoño comenzó para muchos de nosotros el último día de vacaciones. Menos mal que nos queda el fin de semana para evadirnos de las rutinas diarias. A mí me gusta el sábado porque es el día que voy a "la busca y captura" de esos restaurantes, hoteles y locales especiales que luego me gusta compartir con vosotros.

Hoy os quiero descubrir (si no lo habéis hecho ya) un espacio lleno de creatividad e ingenio, que apuesta por el medio ambiente tanto en su decoración como en su gastronomía. Se trata de Mama Campo, un restaurante colmado que, desde que abrió sus puertas antes del verano, se ha convertido en uno de los locales de éxito de Madrid. ¿Os apetece conocerlo?

Mama Campo es un proyecto llevado a cabo por David Yllera y su socio Nacho Aparicio, quienes llevaban varios años acariciando la idea de abrir en Madrid un restaurante y una tienda de comestibles como los de antes, con productos ecológicos. En su decoración, David y Nacho han contado con la inestimable colaboración del reconocido fotógrafo de interiorismo Manolo Yllera, hermano de David, quien apostó por una decoración sostenible con muebles reciclados diseñados y fabricados por más de 40 creadores y artesanos nacionales e internacionales.

Materiales naturales, como la madera, las piezas recicladas y los colores cálidos son las señas de identidad de Mama Campo, donde podemos admirar una extensa combinación de muebles de distinta procedencia, forma o color. Una de las primeras cosas que impactan al entrar en el local son los techos y las paredes elaborados con caña, bambú, cemento y adobe, obra de la Cooperativa de Bioconstrucción Qatay, a los que se suman las esteras de esparto del artesano Juan Sánchez.

Delante de la barra, destacan los taburetes diseñados por la interiorista Inés Benavides y junto a la puerta de entrada; la mesa (sobre estas líneas), hecha por encargo de Pablo Limón, se rodea de las sillas Chubby, amarilla y roja, de Dirk Vander Kooij, mientras que la vegetal verde es un diseño de los Bourollec para Vitra. La vajilla viene desde Portugal, de la mano de Costa Nova.

Durante el día, el local cuanta con una luz espléndida procedente de los amplios ventanales que dan a la Plaza de Olavide. Las paredes están hechas de adobe y cemento, que refuerzan el carácter rural del local. La iluminación juega un papel esencial a la hora de conseguir los ambientes cálidos y naturales que se respiran en este local. Jangir Maddadi diseñó las Wash Lamp que cuelgan del techo con cables ondulados. El suelo de madera es un diseño de Inés Benavides.

Otro de los atractivos de Mama Campo son sus diferentes rincones, que lo mismo pueden acoger comidas y cenas más íntimas, de dos o cuatro comensales, como celebraciones más numerosas. Incluso pueden acoger tertulias de media tarde alrededor de una mesa alta con taburetes, como la que veis en la imagen sobre estas líneas, con la mesa de Pablo Limón y las sillas de Bruno Gavira.

La lámpara de nidos de abejas es obra de Marc Krusin's y está hecha de tablas recicladas. En lo que a gastronomía se refiere, el cocinero Daniel Larios recupera los sabores de toda la vida, para disfrutar de una buena cocina casera con toques actuales, como las croquetas de cocido, el pollo de corral en pepitoria o los huevos en su nido de tempura de patata.

Cada rincón de Mama Campo es una apuesta por la creatividad y la imaginación de los jóvenes diseñadores nacionales e internacionales. El cuarto de baño, diseñado como una viñeta de comic, es obra del artista Bruno Gavira. Las baldosas, hechas a mano, son de Pop Ham Design.

El colmado de Mama Campo

Todos los platos que se sirven en el restaurante se realizan con la materia prima procedente del colmado anexo. Un espacio repleto de productos sanos y naturales con una extensa oferta de alimentos envasados de marcas de producción ecológica u orgánica de diferentes regiones españolas.

La zona de frutería está perfectamente integrada al fondo de la tienda. Para iluminarla se han colocado las lámparas PET de Álvaro Catalán de Ocón, realizadas por artesanos bolivianos con trozos de botellas de plástico y fibras naturales. El suelo, con baldosas de Entik, están diseñadas por los jóvenes Mut Design.

Todos los productos de la tienda tienen "certificación ecológica” y son “traídos directamente de agricultores y ganaderos que miman sus productos y cuidan de su entorno”. Además, como señalan los carteles que cuelgan de las paredes, todos los productos tienen nombre propio: las hortalizas de Aurora, las patatas y puerros de Celso, los huevos de las gallinas felices de Mikel, la miel de las colmenas de Antonio, la leche de Julio, los yogures y los quesos de Alfredo y Jorge...

Mama Campo también dispone de una tienda de alimentación con productos bio. Todas las estanterías, que recorren las paredes del local, son de madera reciclada. Las golondrinas de la pared son obra de Bordallo Pinheiro.

Si pasas por Chamberí, no te lo pierdas. Los toldos de esparto son obra de Juan Sánchez. La puerta está custodiada por arbolitos, entre ellos un limonero de plantación ecológica. Fotos: Manolo Yllera. Vía: Gastroeconomy.

Mama Campo. Restaurante.
Plaza de Olavide. Tel.: 91 447 41 38
Mama Campo. Colmado. Trafalgar, 22. Tel.: 91 622 75 16
www.mamacampo.es