La mesa de Navidad de una estilista de decoración
Las estilistas son esas grandes magas de la decoración, que igual colocan un simple cojín con una gracia inusitada, como ponen una mesa con cuatro trastos y queda sencillamente espectacular. Tienen el don de saber colocar objetos, combinar colores, mezclar texturas, elegir adornos, distribuir muebles... con un encanto y sentido estético fuera de lo común. Lo hacen no solo en su trabajo, sino también en su propia casa. O sea, que no es una impostura. Lo llevan dentro y lo practican. Y ésta es la prueba: la mesa que la estilista y decoradora Isabel Flores ha preparado para la comida de Navidad. Son imágenes caseras, que nos ha mandado sobre la marcha y que no tenían el propósito de aparecer en ningún post. Pero, por ello mismo, son auténticas y muestran, con absoluta naturalidad, el trabajo de una estilista de pro.
Los tres elementos
Como veis, el estilo de Isabel tiende hacia un refinado clásico contemporáneo, con cierto acento francés, en donde el blanco dominante favorece y potencia la presencia de tres elementos muy decorativos: la lámpara de lágrimas de cristal; la vajilla de porcelana inglesa Churchill, de Carrillo; y el espectacular centro de mesa, realizado por A Flore Mío, con ramitas de abeto, eucalipto y frutos del bosque en tonos rosas y rojos, colocado en una sopera de plata agallonada, de Durán, y rodeado de corales artificiales. Todo ello, a su vez, se encuentra sobre un espejo envejecido rectangular, de Galería del Robles, con el fin de que, cuando sea necesario despejar la mesa, se pueda retirar todo el conjunto.
El comedor
El objetivo era no recargar la mesa en exceso, para dar relevancia a los elementos más decorativos. Así, como fondo se eligió un mantel blanco adamascado de hilo portugués, de Sandra Marques; cristalería, de El Corte Inglés y cubertería de plata, de Durán. Al fondo, en la alacena, destacan diversas piezas de cerámica blanca de la conocida fábrica de San Claudio, adquiridas en Sandra Marques.
La escena
Isabel colocó junto al comedor y cerca del salón una mesa auxiliar que da apoyo a la mesa principal y a la de los niños. Aquí se dispusieron más platos y cubiertos, y se dejó espacio libre para las bandejas y soperas con las viandas calientes. Para adornar la mesa, se eligieron unas orquídeas dentro de un jarrón de cristal transparente y un helecho del género Adiantum (popularmente conocido como culantrillo, por su parecido al cilantro), en una maceta cuadrada de cerámica blanca.
El toque de estilista
La forma de colocar los cubiertos en una mesa siempre desvela el toque de una buena estilista. Y aquí no podía ser menos. Isabel recurrió nuevamente a una base de espejo, esta vez redonda, para exponer los cubiertos dorados adquiridos en Bali (aunque los hay similares en Zara Home), colocados en orden en copas y vasos de cristal. Un "gesto" decorativo muy sencillo y absolutamente encantador.
Los detalles en verde
Finalmente, queremos compartir otro secreto de Isabel. Para los toques verdes, tan importantes en la decoración navideña, Isabel utilizó, tanto en el árbol como en la guirnalda de la chimenea, una base artificial, que rellenó con ramas de abeto y otros árboles y plantas. Así, consiguió un aspecto más natural, más tupido y con su característico olor. Los adornos del árbol y la guirnalda son de Fronda y de Muy Mucho. Si queréis aprender de las que más saben, podéis seguir a Isabel Flores en Instagram.