Ideas para guardar tus collares
Mantener tus collares y demás complementos siempre perfectos y a la vista no tiene por qué ser una misión imposible. Es más, si pones en práctica estas ideas ya no volverás a repetir pendientes para evitar enfrentarte cada mañana a la búsqueda de los complementos perfectos. Así que, ¡empecemos!
Primero, recupera las joyas y bisutería que tengas repartidas en distintas cajitas o saquitos y separa las cosas buenas de las baratijas. Organiza tus collares, pulseras, anillos y pendientes y procura no volver a mezclar las piezas de valor con las de mercadillo. Cuando tengas las joyas que realmente quieres conservar, clasifícalas por categorías para saber la cantidad de piezas que tienes de cada una y buscar soluciones a su medida. Para los collares una buena opción son los colgadores que, además, si quedan a la vista pondrán una nota de color en la decoración. También puedes buscarles sitio en el interior del armario o en un rincón del vestidor, especialmente a tus collares de oro (a menos que quieras que tus hijos hagan de ellos el accesorio ideal de sus disfraces).
Collares colgados en la pared
Mira que idea tan sencilla para guardar collares y pulseras realizada con ganchos adhesivos. Para este DIY es fundamental hacer primero un croquis en un papel que te ayude a organizar bien la composición, saber qué distancia tienes que dejar entre un gancho y otro según el largo tanto de los collares como de las pulseras. Ten en cuenta que la gracia de esta composición es precisamente esa: que los ganchos queden a distinta altura.
Un joyero muy creativo
Con una moldura de madera o una rama de un árbol (si sueles salir a pasear por la sierra seguro que encuentras más de una), puedes hacer tu propio organizador de collares. En cualquiera de los dos casos, procura que la madera no sea muy fina para que luzca mejor. ¿Te animas a hacer uno? Es muy fácil.
Si optas por una rama, primero tendrás que limpiar la madera y lijar ligeramente cortes y nudos. Perfora la rama o la moldura en sus extremos, a una distancia de unos 3-5 cm del borde. Después, si quieres darle un acabado más duradero, aplica una mano de barniz incoloro. Deja secar y da una segunda capa. Una vez seca, pasa una cuerda por los extremos y haz nudos para después colgar la moldura o la rama en la pared. El paso siguiente será fijar los clavos a lo largo de la moldura o rama, dejando una distancia de 2-2,5 cm entre cada uno de ellos. Ya solo falta colocar el joyero en la pared y colgar los collares.
A la vista
Guardar collares, anillos y broches en cajas o joyeros está muy bien para tenerlas siempre localizadas y evitar que acaben olvidadas, pero ¿y si seleccionas las más vistosas o especiales para convertirlas en elementos decorativos?
Un platito de cristal con unos cisnes labrados y, sobre éste, una lujosa composición a base de perfumes, un delicado arreglo floral y un collar de perlas. ¿Es o no es un detalle ideal para decorar el tocador de tu dormitorio?
En cuencos, tazas o platos
Otra idea muy decorativa es utilizar piezas especiales de una vajilla a modo de llamativos expositores para decorar cualquier rincón. Quizás tengas dos o tres piezas de una vajilla antigua o descabalada que puedas aprovechar para este fin. Desde bandejas de porcelana hasta cuencos orientales, juegos de café de estilo vintage o tazas de té que, por su profundidad, son perfectas para almacenar collares.