Hotel la Almendra y el Gitano
Bien podría estar en una callejuela de cualquier pueblecito mediterráneo. El blanco y azul, el silencio y tranquilidad de sus calles, el empedrado... todo esto me acompaña a un alejamiento total del estrés y bullicio de la gran ciudad. Pero se trata de un pequeño hotelito en el Parque Natural del Cabo de Gata (Almería). Los propietarios de La Almendra y el Gitano se han basado en la arquitectura popular de la zona respetando materiales y formas para que su impacto medioambiental sea mínimo.
Ubicado en una zona sin construciones, todo lo que te rodea es naturaleza. A solo 5 minutos encontrarás la Cala del Plomo, pero si lo que quieres es marcha puedes acercarte a Agua Amarga con todo tipo de servicios.
Esta habitación, mi preferida, es de clara inspiración marroquí. Las formas arabescas en los elementos constructivos y decorativos, la puerta del baño de madera labrada traída desde allí o la pila de lavabo a base de mosaico salpican el espacio tan neutro y claro trasladándote a esos mundos exóticos de babuchas y turbantes. Pero en cada una de las suites o habitaciones podrás descubrir un país diferente.
Las zonas de comedor y estar comparten una misma estancia, pero se diferencian por un cambio de altura. El estar destaca por su colorido en rojo mientras que el comedor mantiene los mismos tonos chocolate en mobiliario, carpinterías y techos. Éste tiene salida directa a la terraza, permitiendo difrutar de los almuerzos dentro o fuera.
Además de disponer de piscina, jacuzzi o servicio de masajes, podrás relajarte en la zona de chill out acompañado de música muy relajante. Da ganas de conseguir una buena oferta de viaje para pasar unas vacaciones tumbado al dolce fer niente. Fotografías: Decoratrix.