Hotel Casa das Janelas com Vistas, en Lisboa
Casa das Janelas com Vistas es una encantadora casa de huéspedes ubicada en el Barrio Alto de Lisboa, que cuenta con doce habitaciones. Sus propietarias son dos emprendedoras catalanas, Carme Rendé y Natalia Tubella, que se fijaron ya hace un tiempo en las oportunidades inmobiliarias y turísticas lisboetas. Hicieron una apuesta fuerte y compraron todo el edificio, que han sometido a una minuciosa restauración durante dos años. Desde luego, no es un hotel al uso; tiene un encanto especial, de casa, de hogar, con una decoración muy cuidada. De hecho, Carme y Natalia quieren dotar a la casa de actividades culturales (presentaciones de libros, recitales de fado, etc.), que la hagan diferente y huir del típico concepto de hotel bed & breakfast.
Durante dos años, Carme y Natalia fueron adquiriendo los muebles y complementos de distintas procedencias, como quien arma un puzzle decorativo. Un cóctel muy bien aderezado, con piezas recicladas, de almonedas, maderas de Bali, kílims indios, piezas de autor (como la silla RAR de los Eames) o de tiendas como Habitat o Ikea. Incluso, en una pared del salón se dejó parte de un andamio de las obras, que ahora sirve de librería.
La soltura con que se mezclaron piezas antiguas, con sillas de los años 50, muebles de estilo industrial, sofás de líneas funcionales y adornos de estilo romántico llama mucho la atención en la sala de estar de la casa, donde se ha logrado crear un aire desenfadado, chic, un poco decadente y muy familiar.
La cocina está abierta al salón y ahí se preparan los desayunos sobre la marcha. Aquí la mezcla del mobiliario también está a la orden: muebles de cocina de acero inoxidable, de Ikea; frente de la pared chapada con mármol de Estremoz; mesa de madera con bancos del diseñador Fernando Brizio; y el detalle curioso lo ponen las lámparas de techo de plástico naranja años 70, que fueron utilizadas como atrezzo en una película de Almódovar.
El desayuno está muy cuidado, ya que es la única comida que ofrecen con el hospedaje y se sirve con mimo y esmero. Además, los domingos ofrecen un brunch con productos de la huerta para fomentar la tertulia y el domingo en familia.
Además de la sala y la cocina, hay un pequeño patio, donde se puede desayunar al aire libre, leer o tomar el té. También, puntualmente, se pueden alquilar las tres estancias (cocina, sala y patio) para organizar una fiesta, comida o cena privada, si la ocupación del hotel lo permite.
Las doce habitaciones son todas diferentes y se puede elegir entre varias categorías: estándar, superior, suite o doble. Pero todas ellas mantienen la cuidada decoración, que incluye la impecable ropa de cama, alfombras artesanales, muebles pintados a mano...
La mayoría de las habitaciones tienen espectaculares vistas sobre la basílica de Estela, el río Tajo, el puente 25 de Abril, el Monasterio de los Jerónimos o sobre la Nova Rua do Loureiro, donde en el número 35, se encuentra este edificio recuperado con un encanto que supera todas las expectativas de un hotel normal. Si quieres saber más sobre este hotel lisboeta, entra en su página web www.casadasjanelascomvista.com