Decorar con hojas secas
Seguro que en estos días has pasado por algún jardín, calle o bulevar lleno de un manto de hojas secas. Algunas de las que caen de los árboles no están secas del todo, aún conservan algo de tersura. Aprovechemos el fin de semana para recoger algunas y crear ellas pequeños arreglos dentro de casa. De este modo las disfrutaremos durante varias semanas, por ejemplo, colocando las más bonitas en forma de media luna en nuestro jarrón favorito.
Recoger las hojas secas
El primer paso es elegir las hojas que vamos a utilizar. Para ello, debemos buscar las que estén más tersas y brillantes (flexibles), que aún no se hayan secado totalmente para que no se rompan al manipularlas. Buscaremos hojas que no estén manchadas, que no tengan pequeños agujeros y conserven el peciolo en buen estado (rabito que une el limbo de la hoja con la rama o el tallo). Podemos elegirlas todas de un tono similar o de diferentes colores, pero de parecido tamaño para formar un ramo homogéneo.
Conservar las hojas varios días o semanas
Al igual que cualquier flor, las hojas recién caídas, conservan la humedad, la forma y el color durante varios días solo con refrigerarlas. Si no las vas a usar en varios días, puedes conservarlas poniéndolas entre dos hojas de papel de cocina húmedas. Sin embargo, para que las hojas conserven su color y forma durante varias semanas o más, hay que pintarlas con cola blanca o un barniz satinado incoloro. En una superficie lisa y sobre un papel o cartón, aplicamos con un pincel la cola o el barniz y dejamos secar. Así de sencillo.
Una vez se hayan secado, ya puedes armar el jarrón con tus hojas de otoño. En este ejemplo realizado por Justine Mano para El Gardenista, se ha optado por colocar todas las hojas en la misma dirección y amontonadas para que se conserven lisas durante más tiempo. El resultado es encantador. Ahora te toca a ti intentarlo. Idea: Justine Mano. Vía: Gardenista.