Candeleros en un Trix con tulipas recicladas
Estaba yo el otro día dando vueltas por el estudio y buscando algo especial para reciclar y... voilà, descubro unas hermosas tulipas de cristal estilo años 50 de cuya madre y lámpara nadie sabía el paradero. Empecé otra vez con las vueltas –qué hago con ellas, son sólo cinco– pero ellas solitas se fueron colocando en la mesa (me gustó mucho que fueran impares) como si quisieran decirme que querían seguir dando luz a los nuevos comensales. Entonces comprendí que habían pertenecido a una lámpara de comedor y nada mejor que devolverlas a su antiguo escenario.
Cuán diferentes debían ser sus inquilinos de entonces, gente formal, los nuevos no son gente de sentarse a comer a una hora fija y suelen tener el ordenador abierto mientras comen bocadillos, pizzas o ensaladas. Pero ellas como si nada, las alineé en una fila desigual y les coloqué unas velas de colores entonadas en malva y turquesa que compré en la tienda Tiger que hay en el barrio. Me han quedado muy siglo XXI, ¿no os parece? Y todo en un trix... Desde ese día se han convertido en los candeleros oficiales del estudio cuando queremos quedar bien con alguien. En la mesa hay otro truco. Una tulipa malva y solitaria que no tenía amigas ni primas, la convertí en un jarrón improvisado. Vuelta del revés, introduje en su interior un vaso de cristal transparente para poder colocar flores. Y tú, ¿tienes alguna tulipa antigua para reciclar? Fotos: Decoratrix.